¿SABES DESCANSAR?

Todos en algún momento hemos sentido cansancio, algo muy natural, ahora bien, “hay etapas” en donde realmente vivimos cansados, agotados y sin energía, bien sea por exceso de obligaciones, estrés, cansancio acumulado o por no saber descansar, así como lo lees, descansar no es solo tirarse en una cama y dormir, o decir “mañana duermo hasta tarde”, descansar es mucho más que eso, es relajar músculos, es dormir, sonreír, comer sano para que el cuerpo se aligere un poco y lo más retador lograr estar con la mente tranquila.

¿Cómo lograr el descanso pleno?

El secreto está en planificar el descanso, así como llevamos nuestra agenda laboral para que nada se nos olvide y anotamos todo de manera cronológica, así, debe ser el primer paso para organizar las actividades de nuestro merecido descanso, desde escoger nuestra comida, la película que queramos ver, el lugar y la compañía, donde ir a distraernos, ¡planificar! He allí el éxito.

Mucha personas quizás no estén de acuerdo con planificar el descanso de un fin de semana, sin embargo, cuando analizas el tiempo que debes invertir pensando en que cocino, a donde voy, con quien estaré, que haré… en toda esta improvisación se nos puede ir el fin de semana “en blanco”, llega el lunes “a trabajar” y no relajamos ni disfrutamos absolutamente nada, porque el tiempo se nos fue “pensando”.

Tomar el descanso como un deber y no como un privilegio es vital, las consecuencias del cansancio crónico son irreversibles: migrañas, hipertensión, problemas digestivos, insomnio, dolor de espalda y cuello, adicional a ciertas alteraciones psicológicas.

Por esto es necesario invertir tiempo en nuestra planificación de descanso, ciertamente lo vale, nuestro cuerpo y mente lo sabrán agradecer, para quienes les gustaría ampliar sobre los beneficios del descanso, puedo sugerirles el libro “Aprendiendo a vivir: El Descanso” escrito por el Psiquiatra Fernando Sarráis un texto súper útil y sencillo de digerir, se consigue tanto en físico como digital.

Haz con anticipación tu menú, compra tus entradas de cine, alquila tu película con tiempo, reserva si el lugar a donde quieres ir lo amerita, si es un descanso de bajo presupuesto, también es válido, decide tu paseo, tu visita, el libro que leerás, !todo! involucra a tus hijos y pareja si los tienes para tengan el mismo norte del descanso supremo. ¡Relaja sonríe, disfruta!